viernes, 22 de junio de 2012

Vaticano reprime monjas estadounidenses

Vaticano intensifica la represión de las monjas estadounidenses

5 June 2012

Por Dan Gilgoff, Editor de Religión CNN.com

(CNN) - El Vaticano niega que hay una conexión, pero su reprimenda a una influyente monja estadounidense, en un momento en que la Santa Sede ya está comprometida en una intensa lucha con la mayoría de las monjas estadounidenses, envía un mensaje claro: los líderes de la Iglesia Católica piensan que las monjas estadounidenses se han convertido en corruptas y deben ser frenadas.


El Vaticano censuró el lunes a la hermana Margaret A. Farley, profesora de la Escuela de Divinidad de la Universidad de Yale, sobre un libro que escribió en 2006 que la iglesia dijo que está fuera de sintonía con la doctrina oficial de la Iglesia sobre la sexualidad humana.

Apenas unas semanas antes, el Vaticano publicó un importante informe que condena a los grupos que representan a la mayoría de las monjas estadounidenses, diciendo que esas organizaciones habían promovido el “feminismo radical”, dejando de lado las enseñanzas en contra de la homosexualidad y el aborto.

“El Vaticano cree que hay un clima de disenso en algunos sectores de la vida de las mujeres religiosas en Estados Unidos”, dijo John Allen, analista de CNN, del Vaticano. “Ellos están tratando de lidiar con eso, y estos dos desarrollos hablar de eso”.

En su reprimenda a Farley, la iglesia se centró en su libro “Just Love: A Framework for Christian Sexual Ethics”, que dice que condona la masturbación y la homosexualidad.

“La masturbación es un acto intrínseca y gravemente desordenado”, dijo la iglesia en un comunicado el lunes que caracteriza los “actos homosexuales” como “actos de depravación grave”.

La reprimenda que advierte a los funcionarios de la iglesia, a no utilizar el libro de Farley, elevó las cejas en el ámbito católico, porque ella es una de las mujeres teóloga católica más respetadas del país.

El reverendo Brian Linnane, un sacerdote jesuita y presidente de la Universidad de Loyola en Maryland, hizo su trabajo de doctorado en teología con Farley. Dijo que la notificación podría tener un efecto inhibitorio sobre la libertad académica en las instituciones católicas.

“Hay una sensación de que la vocación del teólogo es reducida en la presente notificación a simplemente ‘seguir repitiendo lo que ya hemos dicho, y no cuestionarlo, no criticarlo, no tratar de ayudar a hacer que sea más adecuada’. Y creo que eso es preocupante”, dijo.

Linnane dijo que las personas que leyeron el libro sabían que Farley se alejaba de la doctrina católica en ciertas áreas.

“Ella no escribió un libro acerca de las prácticas sexuales. Ella escribió un nuevo marco para pensar en la ética sexual, que mira a la justicia, en lugar de la procreación o la abstinencia, que han sido parte de la tradición”, dijo.

“Yo no creo que sea una cuestión de bien o mal tanto como creo que es sobre la capacidad de plantear preguntas fundamentales, para tratar de desarrollar una nueva comprensión de la tradición teológica y en este caso de la tradición moral.

Linnane dijo que el Vaticano tiene razón en asegurar que los ministros públicos, tales como sacerdotes y monjas estén en la misma página doctrinalmente como los líderes de la iglesia, y él tomó nota de la reprimenda era específicamente contra el libro, no el autor.

“No hay silenciamiento de la Hermana Farley en la notificación, no hay ninguna amenaza a su pertenencia a su comunidad religiosa, es sólo sobre el libro, que todos están de acuerdo, probablemente no se debe enseñar en los seminarios católicos, desde luego no se debe enseñar en las clases de educación religiosa para los jóvenes. Todo el mundo está de acuerdo en que es especulación teológica”, dijo.

La censura se produjo días después de que el liderazgo que representa la mayoría de las monjas estadounidenses concluyó una reunión en Washington para elaborar una respuesta a una evaluación de abril del Vaticano que acusó a las monjas de alojar oradores que predican el “feminismo radical” en una reunión anual de la Conferencia de Liderazgo de Mujeres Religiosas. El grupo representa alrededor del 80% de las monjas estadounidenses.

El informe también dice que las monjas estaban demasiado centradas en la justicia social y no lo suficiente en la oposición al aborto, la eutanasia y el matrimonio del mismo sexo.

Las amonestaciones recientes vienen un año después de que los obispos católicos reprendieron a otra monja, la Hermana Elizabeth Johnson, de la Universidad Fordham, por sus escritos.

Los obispos dijeron que Johnson afirma falsamente que los nombres de la Iglesia católica son “metáforas que no se aplican a la realidad de Dios dentro de la concepción católica tradicional”.

“En los últimos 12 meses has visto dos de las principales monjas católicas de Estados Unidos que son los teólogas en el punto de mira”, dijo Allen. “No estoy seguro de que haya alguien que deje su estatus para seguirlas”.

Muchas partes de la comunidad de monjas estadounidenses y el mundo académico católico han venido tirando críticas contra el Vaticano. En un comunicado, Farley defendió su trabajo, diciendo que no se entiende como una enseñanza oficial de la iglesia.

Farley dijo que temía que el Vaticano “tergiversara (quizás inconscientemente) los objetivos de mi trabajo y la naturaleza del misma como una propuesta que podría ser en el servicio de, no en contra de la iglesia y sus fieles”.

El viernes, los líderes de las monjas estadounidenses que el Vaticano había criticado dijeron que el informe de la Santa Sede estaba “basado en acusaciones infundadas y (era) el resultado de un proceso defectuoso que carecía de transparencia” y que el informe había “provocado escándalo y dolor en toda la comunidad eclesial”.

Representantes de la Conferencia de Liderazgo de Mujeres Religiosas están volando a Roma esta semana para tratar de trazar un camino hacia adelante con los funcionarios del Vaticano. Expertos en la Iglesia, dijeron que las monjas podían aceptar la evaluación, negociar o renunciar en masa y formar un nuevo grupo fuera de la atenta mirada del Vaticano.

Las amonestaciones se originan a partir de la poderosa Congregación Vaticana para la Doctrina de la Fe, que el Papa Benedicto XVI dirigió durante décadas antes de su elevación al papado.

En las entrevistas realizadas al mismo tiempo que ocupó ese puesto anteriormente, Benedicto XVI habló a menudo sobre el crecimiento de la iglesia a través de la poda - haciéndose más pequeña, pero más devota antes de expandirse.

Es difícil saber cuál es la reacción a la lucha entre las monjas estadounidenses y el Vaticano dentro de la comunidad católica estadounidense, pero ha habido algunos focos de protesta contra las acciones del Vaticano.

“Una cosa es cuando el Vaticano va por un teólogo, porque la mayoría de los católicos comunes y corrientes no saben nada de los teólogos”, dijo Allen. “Pero muchos han sido educados por las hermanas en una escuela, a cargo de una hermana, en un hospital o conocen a una monja en su parroquia que está dirigiendo la oficina”.

Y añadió: “Cuando hay una percepción de que las hermanas están bajo el fuego, hay una tendencia a apoyar”.

Hay evidencia de que la reprimenda contra Farley ha elevado su perfil como una teóloga. Su “Just Love” fue el estudio religioso de mayor venta de libros el martes en Amazon.com.

http://religion.blogs.cnn.com/2012/06/05/vatican-intensifying-crackdown-on-american-nuns/?hpt=hp_t2

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